Es común en personas con
sobrepeso que adoptan malas posturas, se realizan movimientos violentos o se levantan
objetos pesados en forma incorrecta. En estos casos es posible que se haya
provocado una hernia de disco que ocasiona el dolor en la espalda.
Se llaman hernias de disco a las lesiones que se
producen cuando alguno de los discos (que son como cojinetes entre cada
vértebra de la columna) se mueve de su lugar, oprimiendo algún nervio. Con este
tipo de lesiones, se puede generar dolor en la espalda baja o, incluso, en
alguna pierna. Cuando el nervio que se oprime es el nervio ciático, el dolor
producido se denomina ciática.
Existen diversos síntomas
que nos alertan de que se ha producido una hernia de disco, como la debilidad,
el hormigueo o el adormecimiento de las zonas del nervio afectado. El tratamiento
puede ser solo con reposo, medicamentos para el dolor e inflamación y, en
algunos casos, acompañados de fisioterapia.
Cuando los síntomas no
responden a estos tratamientos y confirmada una hernia de disco, lo
recomendable es el tratamiento quirúrgico y la posterior terapia de
rehabilitación física. Las actuales técnicas quirúrgicas son de lo más avanzado
haciéndolas menos riesgozas. Solicita
una cita donde evaluaremos tu caso y te prescribiremos el tratamiento
más adecuado para aliviar el dolor de espalda.
Al pie plano se le define como la ausencia o pobre definición del arco
longitudinal del pie, sobre el que se realiza el apoyo al caminar. El arco del
pie se va haciendo evidente con el crecimiento y en su definición influyen
diversos factores.
El pie plano aparentemente
es un problema simple pero, en general, requiere de estudios especializados y
soluciones específicas al problema particular de cada paciente, tanto en niños
como en adultos.
Lo primero es identificar el
tipo de pie plano en cada caso específico para definir su adecuado tratamiento.
Si tu hijo no tiene arco del pie o lo tiene muy poco pronunciado, es importante
que sea evaluado en forma integral por un especialista, para poder establecer
un tratamiento adecuado a su edad y con ello evitarle problemas a futuro, como
la dificultad o molestias al caminar.
Los actuales avances
tecnológicos, nos permiten realizar tratamientos como la cirugía artroscópica para ciertos problemas en las rodillas. Este
procedimiento quirúrgico se lleva a cabo con éxito para reparar o extraer los
meniscos dañados, para extraer pequeños trozos de cartílago fracturado, para la
reparación de los ligamentos, en casos de artritis leve y en algunos otros
problemas específicos de la rodilla.
Para realizar este tipo de
cirugías, los médicos cirujanos
ortopedistas insertamos una cámara diminuta dentro de la articulación
mediante de unas pequeñas incisiones; de esta manera podemos observar el
interior de la rodilla en un monitor y con un equipo especializado realizamos
las reparaciones necesarias, sin dañar otras estructuras de la articulación de
la rodilla.
Cabe destacar que la artroscopía de rodilla es un
procedimiento simple en el que se administra anestesia local para
insensibilizar el área, ya que no se requiere anestesia general, por lo que el
paciente permanece despierto.
Esta técnica facilita la
inspección y el trabajo al interior de la articulación de la rodilla, con lo
que casi no se lesionan los tejidos, dando como resultado un menor dolor post
operatorio. La artroscopía puede
realizarse de forma ambulatoria, con lo que se reducen los costos de
hospitalización.
Si tienes algún problema con
tus rodillas y estás buscando una
solución, con gusto te atenderé. En caso de ser necesaria una artroscopía, ten
en mente que este procedimiento tiene muy pocas complicaciones y ofrece muy
buenos resultados.